Crearon Manno, un marketplace de servicios para el hogar y, a menos de un año de su lanzamiento, ya preparan su desembarco en la región.
Una plataforma que conecte a usuarios con diversos prestadores de servicios, desde gasistas y plomeros hasta profesores de inglés y expertos en todo tipo de reparaciones. No se trata de la primera empresa en solucionar esto a través de un marketplace, sin embargo, los fundadores de Manno aseguran haber estudiado a la competencia para encontrar un modelo de negocios que resulte beneficioso para todas las partes. A solo un año de haberse lanzado al mercado, ya preparan su desembarco en Chile.
El punto clave, indica Florencia Schenone, CEO de la startup, estaba en la monetización. "Hicimos varios focus group pre y pospandemia con respecto al modelo y nos dimos cuenta de que el primer paso tenía que ser con una comisión fija", comenta. Asimismo, se enfocaron en un esquema B2C.
Los usuarios cargan en la plataforma la necesidad que tienen y, luego, los profesionales envían sus presupuestos los cuales aparecen ordenados por precio, horario y calificación del especialista. Una vez realizado el trabajo, el profesional paga una suma fija de US$ 4 (a precio oficial). Para inscribirse en la plataforma solo tienen que corroborar sus datos biométricos y su teléfono celular. "Después a medida que completan su perfil con otras garantías, como puede ser una matrícula o especializaciones, lo resaltamos en el marketplace".
Manno comenzó a gestarse en 2020 mientras Schenone y su socio, Horacio Leotta (CTO), trabajaban en una agencia dedicada a la adquisición de usuarios para otras apps. Más tarde se sumó Tomás Trippel como partner y chief strategy officer (CSO). Para el desarrollo de la plataforma invirtieron US$ 30.000 entre friends and family, desembolsos propios y la inyección de capital por parte de un inversor ángel. "En los últimos cuatro meses aceleramos la base de 2000 usuarios a 20.000 activos, de los cuales 1000 son especialistas", detalla.
Primero hicieron un lanzamiento piloto en el barrio porteño de Palermo con servicios para el hogar. Más tarde se abrieron paso por el resto de CABA y en octubre se expandieron a Vicente López, Nordelta y Pilar. A su vez fueron sumando categorías en base a la demanda y búsquedas clave online, como arreglo de pisos, plomería y electricidad.
También cuentan con otros tres verticales: tecnología (arreglo de celulares hasta tablets y PC), clases (gimnasia, canto) y "arreglatodo" (enfocada en pequeñas tareas hogareñas de fácil resolución).
En el primer trimestre de 2023 planean lanzarse en Chile una vez cerrada su ronda semilla, que esperan sea de entre US$ 500.000 a US$ 2 millones. "Decidimos abrirnos ahí porque queremos desembarcar en una gran ciudad en cada país y después ir abriendo el radar. Analizamos la forma en la que se expandieron otras apps y queremos adoptar la misma estrategia", detalla. Proyectan alcanzar a 50.000 usuarios en el mercado chileno. Después planifican plantar bandera en Salta, Córdoba y Santa Fe.
Actualmente solo cuentan con una vía de ingresos y en 2023 esperan alcanzar las 18.000 contrataciones, lo que representaría US$ 72.000 de facturación. Pero Schenone asegura que el roadmap incluye una diversificación del mix. "Tenemos otros planes, desde cobrar comisiones, un sistema freemium hasta poder dar préstamos en cuotas para pintar tu casa o un marketplace de herramientas".
EN CIFRAS
Fundación: 2021
Inversión inicial: US$ 30.000
Facturación (proyectada): US$ 72.000
Cantidad de usuarios: 20.000