Sólo en términos de género, los índices en la participación laboral muestran que todavía hay mucho camino por recorrer para modificar la actual estructura de desigualdad y eliminar los sesgos existentes en el mercado laboral.
Según datos de la CEPAL, en América Latina y el Caribe el 78.1% de las mujeres ocupadas trabaja en sectores definidos por la organización como de baja productividad. Esto implica peores remuneraciones, menor contacto con las tecnologías e innovación y en muchos casos empleos de baja calidad.
Sin embargo, de acuerdo con una investigación de la consultora McKinsey, las empresas con mayor diversidad de género tienen un 15% más de posibilidades de obtener mayores beneficios financieros. Asimismo, las empresas con mayor rango de diversidad racial y étnica tienen un 35% más de posibilidades de obtener resultados financieros superiores a los de la media en la industria.
La pregunta es: ¿por qué?, ¿cuáles son los beneficios de tener equipos de trabajo diversos?
¿Qué aporta la diversidad a la empresa?
Potencia la innovación
La diversidad potencia la innovación porque asegura que todas las voces —incluidas las de las minorías— sean escuchadas y tenidas en cuenta, permitiendo que surjan ideas novedosas y disruptivas. Esto puede dar lugar a resoluciones más creativas a un mismo problema. Los equipos diversos —en términos de género, sexualidad, origen, edad, formación, etc.— son más propensos a crear ideas innovadoras que generan crecimiento porque tienen la capacidad de replantear la forma en que se han estado haciendo las cosas desde nuevos puntos de vista.
Más objetividad en el análisis
Las ideas que se comparten en un grupo de trabajo diverso son analizadas desde distintas perspectivas y eso hace que deban ser sólidas antes de recibir feedback por parte de otros compañeros. El análisis deberá resistir argumentaciones y cuestionamientos de miembros con diversos conocimientos y experiencias personales. Los sesgos y prejuicios que uno pueda llegar a tener, el resto podrá identificarlos y superarlos para poder realmente hacer un análisis lo más objetivo posible.
Apertura a nuevos mercados
No sólo es importante mirar hacia el interior de la empresa, sino también estar atentos a lo que ocurre en el escenario global. Si el objetivo es expandirse a distintos países, es fundamental contar con empleados que conozcan la cultura, el idioma y los valores de aquellos lugares a donde queremos llegar.
Generación de un espacio de trabajo seguro
Los equipos diversos generan un entorno de trabajo con tolerancia a las diferencias y al intercambio de opiniones. Hoy los postulantes buscan empresas donde puedan expresarse sin condicionamientos, trabajar con equipos interdisciplinarios y poder ser auténticos. Como consecuencia de este ambiente de trabajo amigable la empresa atraerá y retendrá talento.
Hacia una sociedad más igualitaria
El fortalecimiento de la diversidad genera un impacto social a largo plazo y este es el beneficio más importante. La empresa es un actor social y lo que se lleva a cabo dentro de ella puede ser un ejemplo para la comunidad, ciudad o país donde reside. Si todos lográramos una convivencia pacífica basada en el respeto hacia el otro, hacia lo diverso que me complementa y enriquece, podríamos crear colectivamente una sociedad con lugar para todos.