Fundaron Expansión, un espacio de encuentro que busca integrar el arte del desarrollo personal con el mundo de los negocios.
Matías Siles, un emprendedor de 22 años oriundo de Córdoba, se define como “un emprendedor nato, un busca”. Este joven cordobés ha emergido como un destacado referente a nivel internacional en los ámbitos del coaching y el emprendedurismo. Además, desde hace un año, es artífice de uno de los eventos más convocantes del país: Expansión. Un espacio pensado para el crecimiento, el bienestar y la prosperidad de quienes buscan transitar el apasionante, y por qué no también turbulento, camino de emprender.
Aunque llegar hasta acá no fue nada fácil; su recorrido aplica perfectamente a la frase “persevera y triunfarás”. Siles fue criado en el seno de una familia donde si bien nunca les faltó nada, llegaban a fin de mes con la soga al cuello. Para cambiar su realidad, desde adolescente se propuso ser autosuficiente. Para esto tenía en claro que debería crear sus propios negocios. “Desde los 15 años, mientras cursaba el secundario, supe que lo mío no iba a ser ir a la universidad sino que quería emprender y generar riqueza para ayudar a mi familia y tener una vida de abundancia y disfrute”, comenta Siles.
Por aquellos tiempos hizo de todo: en paralelo al colegio, comercializó mantas que su padre le mandaba desde Jujuy -donde vivía ya que estaba separado de su madre-, También incursionó en la venta de entradas para fiestas y ofreció clases de gimnasia en parques, aprovechando su título de personal trainer.
Cuando irrumpió la pandemia, todas estas “changas” quedaron en stand by. En ese entonces Siles ya tenía 18 años y había terminado el secundario así que, en búsqueda de una actividad para hacer durante los días de encierro, decidió empezar a estudiar coaching. A medida que adquiría conocimiento, generaba contenido para las redes sociales: armaba videos explicativos donde compartía información acerca de un determinado tema de interés; sumado a ello ofrecía sesiones online de manera gratuita. En este camino de descubrimiento profesional, “me di cuenta de que me gustaba aportar valor y ayudar a la gente”, confiesa Siles. A paso de hormiga, su perfil en las redes comenzaba a tomar vuelo, su nombre circulaba sin tapujos y sus consultas se monetizaban.
Entrado el 2021 decidió ir por más: se fue a España a hacer un retiro de alto impacto cuyas actividades incluían por ejemplo, caminar sobre fuego y meterse en hielo. “Era la primera vez que salía del país”, comenta el joven. Este viaje marcó un antes y un después en su vida: “Me conecté con la espiritualidad, que es todo aquello que lleva al ser humano a crecer, expandirse y ser una mejor persona”, cuenta Siles. Al cabo de un tiempo se instaló en México donde creó una experiencia que apodó Congela tu Ego que consistía de sesiones de hielo en la playa. Para su sorpresa, el éxito fue rotundo. Aún así, decidió volver a España para convertirse en speaker.
Pero en lo que respecta a la creación de Expansión, este joven no está solo. Su socio es Agustín De Ángelis, un porteño de 19 años que se ha convertido en un formador de alto impacto especializado en coaching y programación neurolingüística (PNL). Su historia es similar a la de Siles. De espíritu emprendedor, su incursión por el camino de la espiritualidad y el bienestar llegó durante la pandemia. “Igual que como le pasó a muchos, en la cuarentena me agarró ansiedad y tuve ataques de pánico. Esta situación me llevó a charlar con mi papá que desde hace 35 años se dedica al coaching. Me dio para leer un libro de Tony Robbins, referente en bienestar que me voló la cabeza y que terminó por meterme de lleno en este mundo”, relata el adolescente.
Motivado por lo que leía en aquellas páginas, decidió empezar a desarrollarse en temas relacionados al liderazgo, la oratoria y el desarrollo personal. Hace dos años, cuando terminó el colegio apostó de lleno por este camino y se embarcó rumbo a Miami para presenciar un evento de Robbins, devenido en su máximo ídolo. En aquellas tierras estuvo radicado seis meses donde además trabajó de mozo en un restaurante para costearse la capacitación. Con los ahorros que juntaba también se formó en el área de negocios alrededor del coaching. Al tiempo, tomó un vuelo a España para embarcarse en una nueva aventura: trabajar como staff en un evento de alto impacto.
Sin esperarlo, la vida de estos dos jóvenes tomaría el mismo rumbo. Creer o reventar: durante aquel retiro en el Viejo Continente que ambos presenciaron, se conocieron y por esas vueltas del destino se dieron cuenta que perseguían el mismo sueño: ayudar a potenciar a las personas. Se aliaron y crearon su propio espacio de comunicación que llamaron Expansión.
“Expansión”: un sueño materializado
Cuando hay ganas, motivos para emprender sobran. Así fue el caso de Siles y de De Ángelis, quienes se embarcaron con la entonces alocada idea de armar un evento para difundir todos sus conocimientos.
Bajo una dinámica de charlas y talleres, Expansión pisa fuerte como un prometedor espacio que apunta a la reflexión, el crecimiento personal y la generación de ideas innovadoras. “Queremos crear un ámbito donde las personas puedan crecer personal y profesionalmente y al mismo tiempo, contribuir al desarrollo económico y al surgimiento de empresas que marquen la diferencia de nuestra sociedad”, explican ambos fundadores.
Siles describe a este espacio como una experiencia de autoexploración profunda y superación. Durante toda la jornada, “habrá distintos bloques de contenido relacionados con la transformación, que ayudarán a los presentes a conectar con el poder y la certeza. También habrá mesas redondas integradas por máximos referentes del habla hispana”, explica Siles.
Precisamente, comenta De Ángelis, la idea nació con la misión de “elevar el nivel de conciencia del emprendedor compartiendo unión y amor”, y continúa: “En este espacio, también buscamos brindarles herramientas para que puedan crecer y posicionar su marca”. En consonancia con su socio, Siles explica que se ha comprobado científicamente que “un pensamiento amoroso contrarresta muchos de índole negativa” y finaliza: “El cambio no se genera por lo que hacemos sino que se da mediante una transformación personal”.
Comentarios