A diferencia de un local físico, los clientes pueden comprar las 24 horas del día. Claves para arrancar y que el negocio sea rentable.
A pesar de que la transformación digital no es algo nuevo, en el último tiempo tomó un protagonismo mayor debido a que muchos emprendedores encontraron en las redes sociales un medio para ofrecer sus productos y cautivar audiencia.
Pero esto no resulta suficiente si la idea es enfrentar nuevos desafíos, competidores y obtener mayores rentabilidades. En estos casos será fundamental que la venta ocurra también a través de un sitio web propio.
Una tienda virtual es una plataforma o página web que es diseñada exclusivamente para vender productos o servicios por Internet. A diferencia de una tienda física, en una tienda virtual los potenciales clientes pueden comprar durante las 24 horas del día, todos los días del año sin tener que salir de sus casas.
Todas las tiendas online deberían incluir fotos, textos y videos para mostrar de una mejor manera las características de los productos. También es necesario que figuren los precios.
¿Cómo funciona una tienda virtual?
Un negocio online cuenta con 4 etapas principales:
1. El proceso de compra: el cliente ingresa a la página web, elige los artículos que desea y los agrega al carrito de compras.
2. La carga de datos: una vez que termina de cargar todos los productos en el carrito, el usuario debe registrarse e indicar su nombre, la dirección de entrega y la forma de pago.
3. La recepción y análisis del pedido: esta fase corresponde a la empresa que recibe la orden de compra, comprueba la información del cliente, revisa el cobro y organiza el envío.
4. La entrega del producto: en esta última etapa se gestiona la logística para que los artículos lleguen en tiempo y forma.
¿Cómo crear una tienda virtual en 5 pasos?
Para armar una tienda online, el CEO y CO Founder de Xubio, una empresa de software de gestión para Pymes, Fernando Arzuaga, describió 5 etapas fundamentales:
1. Definir la estrategia de ecommerce
Tener claro los objetivos y plan de negocios es fundamental para poder crear una tienda online. Para esto, se recomienda:
Realizar previamente un estudio del mercado y de la competencia.
Definir cuál será el público objetivo, qué productos se comercializarán y a qué precio.
Precisar la ventaja competitiva: ¿cómo se va a diferenciar a ese producto del resto? Si la marca ya tiene un nombre, podría utilizarse. Solo habría que constatar que no haya otro dominio igual.
En el caso de que todavía no haya un nombre/marca definida, se recomienda elegir uno que sea fácil de escribir, pronunciar y recordar. A la vez tiene que ser corto y describir el emprendimiento.
Para proteger la marca, hay que adquirir tanto la extensión .com como la del país de interés (.ar, .cl, .co, .mx).
Contratar un servicio de hosting. Antes de elegir un proveedor, es conveniente analizar su reputación, el espacio web y la seguridad que ofrece.
Tener en cuenta la tasa de transferencia de la información. Si la tienda es pequeña, con 1 ó 2 GB será suficiente, pero si se presume que va a tener una gran cantidad de visitas diarias, habrá que optar por un plan a partir de 3 GB. Dentro de los proveedores más reconocidos se encuentran Hostinger, GoDaddy, Hostgator, A2 Hosting, Bluehost y AWS.
2. Diseñar el sitio web
El diseño de la tienda virtual también es un punto importante para atraer usuarios. Se recomienda elegir una tipografía legible, con un tamaño apropiado y utilizar imágenes de buena calidad para estimular la compra.
Además, se pueden optimizar los textos que haya dentro de la página web para que posicionen dentro de los motores de búsqueda.
Por último, asegurarse de que la tienda tenga un diseño "responsive" (o adaptable), es decir, que se pueda ver bien en todo tipo de dispositivo.
3. Ofrecer varias opciones de pago
Cuantas más alternativas de pago se brinden, más se facilitará la operatoria de los compradores. De esta forma, jamás se perderá una venta por motivos financieros.
Además de tarjetas de crédito y débito es importante ofrecer otras opciones como transferencia bancaria, Mercado Pago, Paypal, Rapipago, Pago Fácil o pago contra reembolso, que es cuando el comprador abona al momento de recibir el producto.
4. Organizar la logística
Una vez que ya se tiene el dominio, el hosting, el diseño y los métodos de pago, hay que pensar en cómo se entregarán los productos.
Hay que tener en cuenta que la velocidad del envío, la facilidad de devolución y la entrega gratuita están entre los aspectos más valorados por los usuarios que compran por Internet. Por eso, es vital tener una buena logística. Se puede armar un sistema propio de distribución o contratar una empresa externa.
Un factor importante que tiene que ver con la logística es el stock. Si no está controlado, pueden aparecer problemas. Para esta tarea, se recomienda utilizar un software de gestión empresarial.
5. Promocionar la tienda virtual
Una vez que el negocio está online, es necesario promocionarlo para empezar a obtener visitas. Para esto se puede realizar publicidad online, email marketing y redes sociales, que también van a servir para organizar concursos, ofrecer descuentos o firmar alianzas estratégicas con influencers.
Paralelamente habrá que generar contenido de valor relacionado a los productos como capacitaciones gratuitas, ebooks y webinars. De esta forma, también se podrá interactuar con los clientes y generar una comunidad.
Para ganar la confianza de los compradores es fundamental brindar un soporte técnico de calidad y responder con velocidad y efectividad a todas las solicitudes, consultas y quejas de los visitantes.
Para mejorar la atención se puede ofrecer un servicio de chat en vivo o agregar secciones de contacto y preguntas frecuentes. Además es clave proteger los datos de los clientes de ataques maliciosos y evitar estafas y acciones fraudulentas.
También es importante evaluar los resultados. Para saber si la tienda online está alcanzando los resultados previstos es necesario realizar evaluaciones periódicas tanto del tráfico y del perfil de los visitantes, como de las ventas.
De esta manera es posible saber qué acciones implementadas fueron exitosas, cuáles son los productos con más salida y qué procesos se necesitan mejorar.
¿ Cuáles son los beneficios de una tienda virtual?
Crear una tienda virtual ofrece muchas ventajas para el emprendimiento. Entre los principales se encuentran:
· Está disponible las 24 horas, los 365 días del año, ya que es un comercio que nunca cierra.
· A diferencia de los locales presenciales no requiere de una gran inversión en personal y alquileres, lo que ayuda a ahorrar costos.
· La mayoría de los procesos están estandarizados por lo tanto, no hay pérdida de tiempo.
· Permite llegar rápido y fácil a un gran número de clientes, incluso de otras ciudades y países. · Aumenta la visibilidad y el conocimiento de la marca y favorece el alcance de las metas en ventas.
· Ofrece la posibilidad de manejar los tiempos e incluso trabajar desde casa.
· El registro de los usuarios y la interactividad posibilita el acceso a información detallada de los clientes y el análisis de sus comportamientos y preferencias. Esto facilita la generación de productos y ofertas personalizadas y la mejora en las campañas de marketing.
· El ecommerce ofrece una mayor flexibilidad para adaptarse rápido a los cambios en el mercado.
En tanto, entre las mayores desventajas de crear una tienda online se encuentran la alta competencia y la falta de un contacto directo con los clientes, lo que a veces genera desconfianza.
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